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Los problemas auditivos: enemigos del rendimiento escolar
En un escenario completamente diferente al que estamos acostumbrados, estas semanas se está produciendo la vuelta al cole de todos los niños y niñas de España. Para preparar ese regreso compramos libros, ropa, material…pero ¿prestamos atención a todo lo importante?
Las dificultades auditivas, que en algunos casos pasan desapercibidas, son una de las principales causas de problemas de atención y por lo tanto de de bajada de rendimiento académico y calidad de vida. Es importante prestar atención a los indicios de este tipo de dificultades y pedir la realización del cribado auditivo a nivel universal para la detección de hipoacusias o sorderas al nacimiento.
La realización de un cribado que facilite la detección precoz de la hipoacusia es importante para el diagnóstico y la calidad de vida del niño. Los trastornos auditivos pueden tener un impacto negativo en el desarrollo de los pequeños y en su calidad de vida si no sos diagnosticados a tiempo. Incluso aquellos con pérdida leve a moderada pueden presentar trastornos del aprendizaje o del lenguaje verbal. Cuanto más temprano se detecte y se atienda al niño, mayor será la probabilidad de que alcance todo su potencial.
Por ello es fundamental tener en cuenta los signos de sospecha en cada etapa:
- Bebés:
- No tiene sobresaltos ante ruidos fuertes.
- Sigue durmiendo aun cuando usted habla fuertemente cerca de él o ella
- No dirige su atención a una fuente de sonido después de los 6 meses de edad.
- Deja de balbucear (después de los 9 meses de edad)
- No dice palabras sencillas como “mamá” o “papá” cuando tiene 1 año.
- Voltea la cabeza al verte pero no cuando le llamas. A veces pensamos que se trata de falta de atención o que el niño simplemente ignora a la otra persona, pero puede ser el resultado de una pérdida auditiva parcial o total.
- Parece escuchar algunos sonidos pero no otros.
- Niños:
- Comienza a hablar tarde.
- No lo hace de forma clara.
- Es excesivamente distraído.
- No sigue instrucciones A veces se piensa que se trata de falta de atención o que el niño simplemente ignora a la otra persona, pero puede ser el resultado de una pérdida auditiva parcial o total.
- A menudo dice “¿qué?”
- Sube demasiado el volumen de la televisión.
- No sabe distinguir la procedencia de los sonidos.
- Adolescentes:
- Comienza a escuchar un ruido en el oído (acúfeno). Puede comenzar a escucharlo al salir de un concierto, discoteca o al haber estado escuchando música con los auriculares muy altos. Debe consultar aunque este ruido desapareciera
- Tiene problemas para entender a los que están a su alrededor al salir de un concierto, discoteca o tras escuchar música. Debe consultar aunque mejore la sintomatología.
- Oye, pero no entiende, sobre todo en el colegio, instituto o cuando hay varias personas hablando a la vez.