Un año después de entregarnos el testigo y confiar en nosotros su consulta, a la que tanta dedicación había entregado, hemos querido recoger en nuestro blog una charla con el doctor Tapia sobre su trayectoria, sobre el relevo que hemos tomado y sobre su visión 365 días después.

El primer año de Lourido y Prado en Ponferrada tiene un diagnóstico claro para el experimentado otorrino: “Han sabido aprovechar mi prestigio y darle continuidad en el tiempo. Eso es su mérito. Si un año después son capaces de mantener la satisfacción de los clientes es que algo hacen bien”, reconoce con agrado el doctor.

Durante más de 30 años Manuel Tapia y su esposa Aurora fueron el referente en lo que a Otorrinolaringología se refiere en El Bierzo. Toda una vida dedicada a sus pacientes bien merecía un descanso como nos reconoce el doctor: “He trabajado mucho y pretendía dedicarme un tiempo a mi mismo”. Una decisión que no fue sencilla, porque tal y como nos confiesa “da pena dejar la consulta porque es como dejar una viña y echarla a perder. Era una lástima”.

Un prestigio que el doctor había forjado en su consulta privada y también como Jefe de Servicio en el Hospital del Bierzo: “Es una gran satisfacción haber liderado un grupo de compañeros con el que se hizo un servicio más que decente. La gente gracias a nuestro trabajo no tuvo que irse a Madrid o Salamanca para encontrar una solución a sus problemas”, recuerda con orgullo don Manuel.

Una decisión “muy meditada”, como confiesa el propio Tapia, fue elegir a la doctora Lourido como la profesional encargada de tomar su relevo en la consulta: “Diana está muy bien preparada. Trabajó conmigo en el hospital y es una profesional responsable, seria y cariñosa. Eso es algo que los pacientes saben valorarlo muy bien.” Una decisión de la que no se arrepiente una año después. Como prueba la certeza que le transmite a sus antiguos pacientes cuando le preguntan por ella: “Le dejé una cartera de pacientes importante. Si no estuviese preparada no se lo hubiese podido ofrecer. Cuando me llaman los clientes se lo digo: puedes ir con toda confianza”.

Más de 30 años de carrera que, a juicio del doctor Tapia, han encontrado un relevo a la altura que deseaba: “Me alegro por Diana y Alejandro. Han acertado en su decisión. Tienen una buena consulta que será de las mejores de León y probablemente de toda Castilla y León”.