Horario
-
LU - JU
16:00 – 21:00
MA y SA 10:30 – 13:30
Contacto
-
Teléfono: 987 42 84 20
El Vértigo
El vértigo y los trastornos del equilibrio son un motivo de consulta muy frecuente, tanto en las urgencias como en las consultas de Atención Primaria y de Otorrinolaringología. Afecta por igual a hombres y mujeres y puede darse a cualquier edad, si bien en personas mayores la incidencia aumenta de forma significativa. Sin embargo, los niños también pueden sufrirlo.
El vértigo es un síntoma que se define por la sensación ilusoria de movimiento. Lo normal es notar que el entorno gira a nuestro alrededor, como si nos dieran vueltas las cosas. Así mismo, también podemos apreciar que somos nosotros quienes nos movemos con relación al entorno. Tiene su origen en el oído interno (vértigo periférico), y suele ser difícil distinguirlo de otros síntomas, como el mareo o la inestabilidad
El mareo es una alteración del equilibrio en la que incluimos sensaciones desagradables de vacío en el cabeza, inestabilidad, sensación de malestar y de desmayo, a veces con náuseas, vómitos, sudoración fría y palidez. En otras ocasiones, el paciente presenta solo la inestabilidad o desequilibrio, con sensación de inseguridad al andar.
¿Qué tipos de vértigo hay?
-Vértigo propiamente dicho.
-Mareo.
-Inestabilidad o desequilibrio.
También los clasificamos según la localización de la enfermedad que lo causa siendo periféricos o centrales.
El vértigo periférico es el causado por la afectación del laberinto (oído interno) o del nervio vestibular (que lleva la información del equilibrio desde el oído interno al cerebro), siendo el más frecuente. Los pacientes suelen presentar, pérdidas de audición y zumbidos y presión en el oído.
Por el contrario, el vértigo central se debe a un trastorno del sistema nervioso, y el síntoma predominante es la inestabilidad o desequilibrio o inseguridad.
¿Cuáles son las causas?
En cuanto a las alteraciones del oído las causas más comunes son el vértigo paroxístico posicional benigno, la Enfermedad de Menière y la neuronitis vestibular, que representan la mitad de las consultas por mareo y vértigo.
Aunque existen otras alteraciones del oído, como los tumores (neurinoma del acústico), traumatismos, infecciones, tóxicos (medicamentos que lesionan el oído) o idiopáticos, son menos comunes. Dentro de las causas neurológicas, destacan las de origen vascular, las alteraciones cervicales, y la esclerosis múltiple o en placas.
¿Cómo se diagnostica?
Lo primero es un correcto interrogatorio. Se presta especial atención a la limitación que el vértigo genera en la actividad diaria. A continuación, se realiza una minuciosa exploración otorrinolaringológica, es decir, de oídos, fosas nasales, boca y garganta (faringe y laringe).
Posteriormente, se realizan:
-Una exploración neurológica.
-Una audiometría o estudio de la función auditiva.
Y en caso de ser necesario, añadiremos:
– Una exploración específica del aparato del equilibrio localizado en el oído, conocida como Prueba Vestibular Computerizada Completa.
– Una Resonancia Magnética Nuclear o un TAC (tomografía axial computerizada) del oído y el cerebro.
Normalmente con la ayuda de la historia clínica y de las exploraciones, junto con la audiometría y la Prueba Vestibular Computerizada Completa suelen dar una idea precisa de la localización del vértigo, de su causa y del tratamiento adecuado a seguir.
En caso de no ser así, el paciente, será explorado adicionalmente por un neurólogo especializado en vértigo.